A finales de los años 60, surgió en Estados Unidos un grupo de artistas que pintaban con gran realismo objetos y escenas de la vida cotidiana utilizando la fotografía como base para la realización de sus obras. Así nació el llamado hiperrealismo. La consagración del movimiento tuvo lugar con su exposición en la Documenta de Kassel en 1972.
Robert Estes
Desde hoy, el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid presenta Hiperrealismo 19967-2012, una exposición que por primera vez plantea una genealogía del Hiperrealismo desde los grandes maestros norteamericanos de la primera generación, como Richard Estes, John Baeder, Robert Bechtle, Tom Blackwell, Chuck Close o Robert Cottingham, a su continuidad en Europa y al impacto en pintores de generaciones posteriores, hasta la actualidad.
Bertrand Meniel
El Hiperrealismo no es un movimiento cerrado; hoy, más de cuarenta años después de su aparición, continúan en activo muchos de los pioneros del grupo y nuevos artistas utilizan la técnica fotorrealista en sus creaciones. Herramientas y motivos han evolucionado o cambiado con el tiempo pero, con su increíble definición, nitidez y detallismo, las obras hiperrealistas continúan fascinando al público.
Tom Blackwell
Clive Head
Procedentes de diversos museos y colecciones particulares, esta retrospectiva reúne 66 obras de tres generaciones de artistas; está organizada por la el Institut für Kulturaustausch (Instituto para el Intercambio Cultural de Alemania) y curada por su director, Otto Letze. La Kunsthalle de Tubinga (Alemania) ha sido la primera escala de un recorrido que llevará la muestra a varias ciudades europeas; en el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid podrá verse hasta el 9 de junio y, posteriormente, viajará al Birmingham Museum & Art Gallery (Reino Unido).