Sergey Balovin, es un artista ruso de 28 años que descubrió como vivir del arte en Shangai y que, con su vida y con su obra, ofrece una nueva perspectiva al término de «artista hambriento» porque no hay ninguna posibilidad de que se muera de hambre. Hizo base en Shangai y ahora viaja por el mundo pintando sus retratos.
Según una entrevista realizada por Visual News, su arte y su modo de vida de intercambio de bienes, comenzaron cuando la vecina de su departamento en Shangay se mudó y Sergey notó que la chica estaba deshaciéndose de muchos objetos que dejaba en la basura. Descubrió que en su casa había un atril y le preguntó si se lo podía quedar. Esto sucedió en 2010.
La vecina le contestó que se trataba de un regalo y que no pensaba desprenderse de él. Luego de conversar por un rato, ambos acordaron que Sergey podría usar el atril a cambio de darle a ella clases de pintura. Este trueque inicial, que tuvo lugar en 2010, fue el que le disparó la idea de qué podría ofrecer él para seguir viviendo a través del intercambio.
Así, desde entonces pinta retratos a cambio de los cuales recibe los objetos que necesita para vivir: desde ropa a comida y elementos para continuar pintando. Hace dos retratos por cada sentada de un «cliente». Uno para el cliente y otro para él y lo va incorporando a su proyecto In Kind Exchange, que podría traducirse como «intercambio en especias». Intrépido, logró un modo de vida sustentable a través del trueque y nunca aceptó dinero por una obra. Vive al día y de modo liviano, como para levantar campamento y, moverse por el mundo como está haciendo ahora.
[youtube=http://youtu.be/1gFNTZgSyKw]
«Me gusta conocer gente y me gusta pintar retratos para ella», afirmó al Global Times. «El In-Kind Exchange es como un regalo para mí y cambió mi vida completamente. No tengo miedo de vivir sin dinero y me di cuenta de que puede sobrevivir a través del arte».
Así amplió su proyecto y trasciende lo límites de Shangai. Acepta la propuesta de cualquier que le ofrezca invitarlo a su casa a cambio de comida y de un lugar donde dormir hasta que aparezca su próximo destino y él ofrece sus ya míticos retratos.
«Al principio pensé que iba a ser un modo de vida temporario -expresó- pero ahora no me imagino viviendo con plata».
Ayer Jaque cheteó con él y contó que estaba en Thessaloniki, Grecia, con una extensísima ruta bookeada para los próximos meses. Sus próximas paradas son Albania, Macedonia y Montenegro. Nos pidió que publiquemos su contacto desde donde se lo puede invitar a pasar unos días en alguna parte de Argentina o desde el lugar donde estés leyendo esta nota.
Nice trip, Sergey! Esperamos que alguien que lea esta nota te invite. ( We hope someone reading this article, offers you an invitation).
Jaque prometió mandarle un guiño desde esta nota y nobleza obliga. A último momento se nos ocurrió preguntarle si aceptaba sexo como material de intercambio. Hizo silencio, dejando claro que no es un toy boy o quizá, dejando la respuesta abierta.
Así trabaja, así seduce, así vive. Observalo:
[youtube=http://youtu.be/1psMQU_ha6s],
Fascinante!
En este caso, «In kind exchange» es «Intercambio en especias»
Saludos, Buen trabajo!
Elena
Lo chequeamos y tomamos tu propuesta. Gracias, Elena!!