Por Alexia Tala, curadora
La exposición Lembre-se de lembrar: Uma aproximação de artistas latinoamericanos à sua história, en Carbono Galeria, São Paulo, reinstala la pregunta por los relatos que articulan la historia en Latinoamérica y su memoria, en una época donde la historia como disciplina ha evidenciado su carácter retórico, incompleto y ficcional. ¿Qué es?, ¿Cómo fue escrita?, ¿Cuántas micro historias están contenidas en la gran historia que muchas veces pasaron sin ser registradas ni conocidas? Independientemente de las ideologías políticas que fueron dominantes en América Latina, los sectores de la oposición en esos momentos permanecieron silenciados y reprimidos, pero la identidad latinoamericana después del silencio aún tiene mucho que decir.
La obra de Alfredo Jaar, que utiliza una frase de Samuel Beckett, I Can´t go on – I will go on, sugiere una lectura de lo que ha sido históricamente el sentimiento de continente enfrentado a dictaduras, manipulaciones e injusticias. Enrique Ramírez, Carlos Garaicoa y Sandra Gamarra se enfocan en imágenes particulares que remiten a distintas violencias político-económicas de la historia y el cotidiano latinoamericano. Enrique Ramírez (Chile) reinterpreta la ausencia y la desaparición en dictadura por medio de la imagen en movimiento, además de una vitrina que alberga un libro de frases secretas al que no podemos acceder. Por su parte, Samara Gamarra (Perú) recolecta los periódicos publicados durante una semana en los países de Brasil, Chile y Perú y elabora un tríptico con tres de sus portadas, remitiendo a través de este recorte mediático referentes a casos de corrupción e interviniéndolos por medio de la pintura. Carlos Garaicoa (Cuba) realiza una obra con tres sellos postales, un sello del Tercer Reich (original acuñado en 1938), un sello del American Post (original United States Postage, Win The War, acuñado en 1942) y un sello suizo (apropiación y nueva edición del sello del Cantón suizo de Basilea de 1945). Su obra habla sobre el uso de ciertas imágenes y símbolos como reafirmación del poder.
Otra lectura del pasado la encontramos en artistas como Melanie Smith (Inglaterra-México), que trata aquellas historias desconocidas. Su obra traslada la mirada hacia contextos inauditos, realidades que parecen ajenas pero que son parte de nuestro continente. Para esta exposición, y a partir de su proyecto Fordlandia (2013), realizará una composición fotográfica que continuará hablándonos desde el ojo del detalle sobre este utópico proyecto de Henry Ford que se ha convertido hoy en enigmáticas ruinas en el Amazonas brasilero. Por otro lado, Alberto Baraya(Colombia), utilizando el humor, desarrolla una pieza más de su serie Herbario de Plantas Artificiales, creando una nueva pieza de una planta carnívora devoradora de héroes Latinoamericanos.
Una intencionalidad discursiva y formal más directa es reconocible en artistas como Carlos Motta, Karlo Andrei Ibarra y Lotty Rosenfeld, donde la crítica y el contexto son enunciados de manera frontal. Carlos Motta (Colombia) exhibe un mapa de madera de América, cuyo color contrasta en negro y blanco y sus dimensiones hablan de las desigualdades del territorio estadounidense y el latinoamericano, respectivamente. Por su parte, Karlo Andrei Ibarra (Puerto Rico) recurre a la vieja tradición colonial del timbraje en caliente sobre la piel que se asocia a la trata de esclavos y utiliza carimbos que llevan los logos de empresas latinoamericanas transnacionales asociadas al saqueo de recursos naturales, humanos y económicos, reflexionando así sobre la globalización y la falsa idea de progreso. El trabajo de Lotty Rosenfeld (Chile) corresponde a una intervención realizada en La Habana, Cuba, en 1985, frente a la Plaza de la Revolución, realizando de manera independiente su reconocida acción de las cruces en el pavimento (la primera en 1979 en Una milla de cruces sobre el pavimento).
El relato que construye Lembre-se de lembrar tiene entonces su propio recorrido. Distintas versiones, ficciones e intensidades articulan una forma de recordar Latinoamérica, devolviendo potencialidad a lo inconcluso de algunas de sus historias.
Foto de portada: Alfredo Jaar, I can’t go on, I’ll go on, 2016, neón, 50 x 50 cm. Cortesía de la galería.
Lembre-se de lembrar: Uma aproximação de artistas latinoamericanos à sua história.Curaduría: Alexia Tala. Carbono Galeria, São Paulo. Hasta el 28 de mayo de 2016
Vía Artishock