Eckart Hahn (Berlín, 1971) crea naturalezas muertas de cierto aire surrealista, en donde determinados elementos de fuerte carga simbólica se hacen recurrentes, como las aves, manos y guantes de látex, envoltorios o papeles con arrugas (la representación de éstos últimos, sin duda, uno de los ejercicios técnicos predilectos de muchos pintores realistas).
El color y la composición son elementos distintivos en estas pinturas en acrílico, cuyos títulos nos remiten directamente al motivo representado, sin engaños ni metáforas. Los colores planos y saturados, y los planos de color, organizan los elementos en estilizadas composiciones. Hay algo de diseño en el trabajo de Hahn, algo de publicidad, algo cinematográfico. Y aunque los temas circundan el imaginario de lo oscuro, su trabajo no es amenazante. Esto es lo que hace: