Fundación Bancaja de Valencia presenta hasta el 25 de junio la exposición Julian Opie con obras del trabajo de los últimos quince años del artista británico (Londres,1958), reconocido internacionalmente por su estilo minimalista y de formas básicas, casi simbólicas, de la figura humana. La exposición reúne una treintena de obras de gran formato que adentra al visitante en aspectos cotidianos de la vida moderna. Las obras expuestas muestran creaciones de Opie desde el año 2000 hasta 2015 en las que utiliza diversas técnicas y materiales como acrílicos, vinilos sobre aluminio, tinta o madera, animaciones y videoinstalación en pantallas LCD y LED.
En su obra, Opie da cuenta de lo que le rodea y trata de introducir en la mirada metropolitana una experiencia estética, además de reflexionar sobre cómo vemos las cosas y las representamos. En su trabajo pretende atrapar lo esencial, con una economía formal que da todo el protagonismo a la línea y el color. Los retratos y las figuras humanas protagonizan esta muestra. Opie comienza a mostrar retratos esquemáticos en el año 2000, en un momento en el que en su trabajo se vuelve decisivo el uso del ordenador y la tecnología. En sus retratos retoma la tradición de la pintura británica y holandesa de los siglos XVII y XVIII, pero también las estampas japonesas, con la inspiración de las obras de Hiroshige y Utamaro.
Opie introduce a sus personajes en un escenario público, donde cada rostro tiene un singular potencial de seducción y donde cada comunidad se desarrolla, con las singularidades culturales de cada territorio y el movimiento o actitud de sus gentes, convirtiendo lo cotidiano en icónico y buscando un lenguaje universal.
«La gente interpreta mis obras de formas muy distintas. En el Reino Unido la crítica suele decir que mi trabajo es duro, afilado, frío, una mirada inhóspita sobre la humanidad. En Estados Unidos, por el contrario, dicen que es liviana, divertida, muy pop. No sé por qué el mismo trabajo genera opiniones tan distintas. Yo espero que mis piezas cubran todo el espectro de mis emociones y sentimientos hacia el mundo», se lee en una de las primeras columnas de la exposición.
«Yo creo que Opie es estrictamente bipolar, y no es una descalificación. El que no sea hoy maniacodepresivo es que no vive en este mundo», afirma Fernando Castro, profesor de Estética y Teoría de las Artes en la Universidad Autónoma de Madrid y curador de la exposición.