Por Vivian Galbán, especial para Jaque al arte
¿Cuál es la frontera entre copiar y reinterpretar? ¿Entre un símil y una cita? ¿Cuál es la causa de la existencia de las obras símiles entre diferentes artistas? ¿Y cuál sera el motivo de la existencia de tantas en el circuito del arte internacional?
En líneas generales podemos decir que una obra es un símil de otra cuando son muy parecidas, casi iguales y la suma de cuestiones estéticas, compositivas, recursos plásticos, cromáticos, conceptos y soportes se parecen muchísimo, al punto de confundirse en una rápida mirada.
Lucien Freud? No: Jaime Sunico
¿Gerard Richter? NO: Maurizio Galimberti
¿Basquiat? NO: Wulf Treu
Y solemos llamar “Citas” a la acción de aquellos artistas que recurren a una obra establecida como clásica, en general de la historia arte, y la toma como base de partida, para reinterpretarla contemporáneamente.
La Lección de Música”de Hiroshi Sugimoto, cita de Vermeer
Si concebimos al “artista” con capacidad de sensibilizarse y percibir la realidad, la energía circundante y convertirla en obra, pertenecientes a una categoría universal plausibles de coincidir en su lecturas y expresar sentires comunes en formas únicas e individuales en un sentido no cronológico y atemporal, podríamos llegar a asimilar “los símiles” como causa de esta “conexión multisensorial” del artista y su lectura universal atemporal del mundo y su realidad.
Nicola Constantino. Las Meninas a partir de la obra de Velazquez
Pero habiendo recorrido las ultimas ferias de arte internacionales y bienales, cito algunos ejemplos -los que están arriba- para preguntarnos si es falta de información, una complicidad silenciosa entre artista/galerista/comprador o simplemente el deseo conjunto de tener y vender algo parecido a lo que no se puede alcanzar.
«Cuando un artista no tiene nada que decir parte de lo que dijo otro «…(firma: Don Vivas del Hurto)