Se lanzó la nueva convocatoria para la nueva edición del Premio Itaú para las artes visuales. Cierra el 17 de octubre, un día emblemático para nuestro país.
Cuando es un banco el que convoca, suelen surgir sentimientos contrariados entre los artistas. Hablamos con dos finalistas de la edición anterior, Guido Ignatii y Paula Otegui, y entrevistamos a Anabella Ciana, responsable del área artes visuales de la Fundación Itaú Cultural, encargada de llevar adelante el concurso.
Nos cuenta Guido Ignatti, finalista de la edición anterior: «Como no salí premiado me parece válido seguir intentando la adquisición, siempre y cuando no implique trabajar para el premio o hacer obra para el premio, que a mi ver sería algo gravísimo. Es importante ser parte de colecciones institucionales y no solo de las privadas, pero también hay que ser responsable y consecuente con el propio hacer. Siempre es una lotería ser seleccionado, y/o ganar, y esto no habla de la calidad de las obras o propuestas sino más bien de que se dé la coincidencia entre obra/artista y lineamiento/jurado, o sea, que justo la obra presentada esté en ligada directamente con lo que busque el jurado de turno, con sus intereses para formar esa colección particular. En la edición pasada seleccionaron video y piezas relacionadas con el cine como las ganadoras, como enunciado fue muy bueno, el de coleccionar video, aunque igualmente yo hubiera hecho otro recorte, pero claro que hay colecciones como miradas. Ahora no se sabe que va a premiar el nuevo jurado, cual será la tendencia que impongan. Particularmente, tuve buenos resultados de mi experiencia. Más allá de la visibilidad que tuve, tanto en Buenos Aires como en las provincias durante la itinerancia, también resultó que unos coleccionistas de afuera me contactaron por esa obra, terminaron comprando otras… pero fue el punto de partida el interés por la que participo».
Otra finalista, Paula Otegui: «Yo me gané una mención en la primera edición del concurso, quedé seleccionada 3 veces. Me parece que fue creciendo mucho a nivel difusión, se fue legitimando muy bien. Como difusión sirve, y si me ha pasado de personas que han visto el salón y después se pusieron en contacto para preguntarme por la obra, por lo que se van a ver las muestras curadores con coleccionistas a los que asesoran sobre nuevas propuestas y artistas; y dentro de la itinerancia también me ha pasado que espacios o curadores del interior se han puesto en contacto. Mis expectativas fueron acceder a algún premio ya que tengo 39 años y son mis últimas chances en salones de estas características que son para artistas emergentes. En mi caso personal que me dedico fundamentalmente a la pintura me interesa también participar por el criterio actual/contemporáneo que no está sólo cerrado a propuestas de pintura».
Esta es la entrevista con Anabella Ciana.
-¿Cuál es el parámetro de excelencia de las obras que esperan premiar?
Desde inicio el espíritu de este Premio es descubrir aquello que se encuentra fuera del radar. Identificar artistas poco conocidos fuera de su entorno y darles visibilidad y difusión a sus creaciones. El premio nos permite mapear lo que sucede en materia de artes visuales en el país, considerando sobre todo que más de 1700 artistas se postulan en cada edición. Las características sobresalientes que comparten hasta el momento las obras adquiridas son: la innovación, la originalidad, la factura, las ideas.
-¿Por qué se establece un límite de edad: lo emergente es siempre sinónimo joven?
El límite de edad de los premios Itaú cultural se debe a la misión que la Fundación Itaú persigue en Argentina «brindar oportunidades a los jóvenes». En el caso de Itaú cultural diseñamos propuestas que les den visibilidad y difusión a los artistas emergentes argentinos, sean estos, cineastas, escritores, músicos o artistas visuales. Por supuesto entendemos que existen personas que comienzan a realizar su arte después de los 40 años. Al existir varios concursos sin límites de edad, nosotros por una cuestión misional decidimos dirigirnos a ese rango edad. Obviamente con esto no queremos decir que los que tienen más de 40 no son jóvenes ni emergentes, pero también por una cuestión de administración de los concursos hacemos ese corte.
¿Con qué criterios eligen los jurados: el de selección y el de premiación?
Todos los años la mayor parte los miembros de ambos jurados cambian. Para conformar el jurado de selección realizamos una convocatoria abierta a través de nuestras redes para que se puedan presentar aquellos que les interese desempeñar esta tarea. A través de esta convocatoria solemos cubrir entre 10 o 12 miembros de este jurado. Solemos repetir miembros cuando han tenido un desempeño destacado en la edición anterior. En esa convocatoria les pedimos que presenten un CV, cinco criterios de evaluación de obra y un breve ensayo sobre el panorama del arte contemporáneo en Argentina. En función de la evaluación de esa información definimos los miembros del jurado de selección. Es importante destacar que siempre intentamos que sea diverso desde todo punto de vista: procedencia, formación, actividad laboral, etc. El jurado de premiación es por invitación y el criterio que perseguimos es el siguiente:
– un miembro internacional, que generalmente es un curador
– un artista local reconocido
– un crítico o periodista cultural
– un miembro de la función pública dedicado a la gestión cultural
– un representante de Banco Itaú
Luego del primer premio fallido del año pasado, ¿Revisaron sus parámetros en cuanto a los jurados? La obra que se adjudicó el primer premio era conocida por la mayoría de los que asistimos a la entrega de premios. ¿Lo consideran un fallo del jurado o de quién?
En primer lugar esto sucedió por una incorrecta interpretación del artista quien luego de ser informado, retiró su obra de la competencia. En segunda instancia, entendemos que esta clase de situaciones pueden filtrarse hoy en día. Estamos abrumados de información y entendemos que fue ajeno a la voluntad del jurado. Por último, y para evitar situaciones similares en el futuro, hemos decidido someter a las aproximadamente 60 obras finalistas a un examen de antecedentes antes de informarlas públicamente.
¿Hay algunos artistas que tienen pruritos en presentarse a un premio dado por un banco por lo que significa la institución bancaria en sí: qué les dirías a ellos?
La realidad nos fue confirmando que el Premio se establece con cada edición en el ámbito de las artes visuales argentinas. Los números de las sucesivas convocatorias (1322 y más de 1700 en las tres ediciones posteriores) confirman que los artistas confían en el Premio. No sólo que participan continuamente, sino que envían obra de mejor calidad.
¿Cómo garantizan la transparencia en la elección de las obras premiadas?
La transparencia nos ocupó desde el principio. Es un aspecto más que fundamental en este tipo de competencias. Para garantizarla hemos tomado las siguientes medidas:
– conformación abierta del jurado: ecléctico y federal
– evaluación cruzada de obras: los jurados nos examinan obras de sus jurisdicción. Ej el jurado salteño ve obras de Neuquén.
– En primera vuelta todas las obras son vistas por una pareja de jurados, de haber desacuerdo un tercer jurado desempata.
– Todos los jurados (de selección y de premiación) ven todas las obras en tercera instancia y puntúan las obras. Las mejor puntuadas son las que viajan a CABA para la evaluación in situ por el jurado de premiación.
– Para asegurarles a los artistas que sus obras fueron evaluadas, los jurados de selección están invitados a darles feedback a los artistas que quedan fuera del premio.
-¿Qué prestigio creés que otorga ser seleccionado y/o ganar el Premio Itaú?
En sus breve 4 años de vida Itaú cultural se fue afirmando como actor en el ámbito artístico argentino. A esto se suma que Itaú lleva en su ADN la pasión por las artes. Sus socios fundadores son amantes del arte y coleccionistas también.Con cada edición la reputación de este Premio crece, como así también su colección de arte contemporáneo.Cada año enriquecemos la propuesta, sea en los premios, en los espacios de exhibición, en los mecanismos de transparencia, etc. Siempre teniendo en cuenta en mejorar las condiciones para los destinatarios de este Premio, para brindarles mejores condiciones y así cumplir nuestra misión. Nos da orgullo saber que los artistas se preguntan: ¿Y, ya te presentaste al Itaú»?