El japonés Azuma Makoto es un artista botánico que creó desde plantas cósmicas hasta ramos hechos de hielo. Ahora acaba de presentar una instalación-performance, Flower Messenger, en las calles de San Pablo.
La instalación estuvo compuesta por 30 bicicletas cargadas de arreglos florales. Cada bicicleta fue conducida por un joven con raíces japonesas. A medida que la flota viajaba de un punto a otro, los «mensajeros» distribuyeron flores a los transeúntes, añadiendo un elemento interactivo a esta pieza de arte público.
Flower Messenger celebra el debut de Japan House São Paulo, una organización que pretende introducir «todos los elementos de la cultura japonesa genuina a la comunidad internacional.» Esta pieza explora y exhibe la reverencia hacia la naturaleza y el interés por lo efímero en Japón, trayendo una porción fugaz de su cultura a un lugar inesperado y lejano. La primera recorrida tuvo lugar el 7 de abril y desde entonces, cada día y hasta el 7 de mayo, habrá circulaciones inesperadas de bicicletas que cambiarán la semblanza de la gran ciudad brasileña cada vez con una ruta diferente.
«Flower Messenger es una interrupción en el flujo nervioso de la ciudad, con un mensaje completamente entretenido e inspirador», explicó Makoto. «De repente ese lugar que estaba vacío ayer, está lleno de flores hoy. Pronto desaparecen, pero siguen siendo un recuerdo. «