Ramas enroscadas de árboles parecen brotar orgánicamente desde las columnas de una de las salas del Palais de Tokio en París. Se trata de Baitogogo, la instalación/escultura plantada -nunca mejor usada la palabra- allí por el artista brasileño Herique Oliveira.
Diseñada por el mismo artista, la instalación simula imposibles nudos gordianos brotando desde las paredes, nudos están construidos con retazos de una madera especial con la que se alzan algunas viviendas en Brasil, las más humildes. Este material fue recogido por Oliveira entre los desechos de las calles de San Pablo.
Nuevamente el arte «híbrido» de Oliveira (San Pablo, 1973), juega aquí con la arquitectura del Palais contrastando la construcción netamente urbana con la orgánica en un juego que permite alternar la visión de los mundos paralelos en los que nos encontramos atrapados, caminando en nuestras ciudades, donde la naturaleza sufre de podas que destruyen el medioambiente.
Es casi un chiste que estos nudos en forma de árboles se planten en las paredes estáticas de un museo, casi como una reliquia de una vida que ya no existe. Todavía no se llegó a tanto, pero quizá en breve, los árboles con esos troncos sólidos y abrigados sean un recuerdo del pasado cercano, de la ilusión del paraíso en la tierra. El arte de naturaleza entra al museo para recordarnos que alguna vez algo tan imponente como los árboles alguna vez existió.
O algo así.
[youtube=http://youtu.be/68K2xoQ5jOk]
Así se hizo la instalación
Gracias Victor Redondo por acercarnos la información
[…] https://jaquealarte.com/2013/08/26/los-nudos-gordianos-de-henrique-oliveira-en-el-palais-de-tokio/ […]